El aire puro es vital para la vida y desarrollo de los seres humanos. Respirar aire puro es un derecho. No contaminarlo es un deber de todos.

Debido a la preocupación por las emisiones contaminantes que afectan la salud de las personas y en respuesta a movilizaciones de la sociedad civil en pro del bienestar de todos, es que el Día Internacional del Aire Puro se instauró desde 1977 -establecido el tercer jueves de Noviembre-, por la Organización Mundial de la Salud (OMS).


Consecuencias de la contaminación del Aire

Entre los múltiples efectos nocivos destacan:

  • Deterioro en la salud del hombre (problemas cardiovasculares, conjuntivitis, enfermedades bronquiales, entre otros).
  • Grandes repercusiones en el proceso evolutivo de las plantas, impidiendo en muchos casos la fotosíntesis.
  • Acumulación de estos gases en la atmósfera genera los ya conocidos problemas ambientales con sus particulares consecuencias (como el smog, la lluvia ácida, la disminución de la capa de ozono, el recalentamiento global, el efecto invernadero, entre otros).

¿Cómo mitigar la contaminación del aire

  • Apaga el motor del coche cuando estés parado.
  • Compartir viaje en un sólo vehículo.
  • Usar más la bicicleta y el transporte público.
  • Plantas para purificar el aire.
  • Composta alimentos orgánicos y recicla los residuos no orgánica.
  • Usar productos limpiadores ecológicos.
  • Cámbiate a sistemas y equipos de calefacción de alta eficiencia para el hogar.
  • Reduce tu consumo de carne y productos lácteos (ayudarás a reducir las emisiones de metano que emite el ganado).
  • Producir menos humo en casa.

Estas acciones se pueden llevar a cabo en ámbito laboral como en el hogar. Todas nuestras acciones tienen impacto ambiental. Es nuestro deber tomar conciencia de nuestros actos y poder reorganizarlas para y por el bienestar común.

¿Qué favorece el aire puro?

  • Estimula la elastina y el colágeno (proteínas esenciales para la elasticidad de la piel y de los tejidos óseo, conjuntivo y cartilaginoso).
  • Reduce las sustancias de carácter cancerígeno que podemos absorber con el aire polucionado.
  • Mejora la circulación sanguínea.
  • Hace desaparecer a las toxinas de nuestro organismo.
  • Nos concentra mucho mejor.
  • Estimula el apetito y favorece la digestión.
  • Evita los nervios y nos mantiene en calma.
  • Favorece el sueño profundo.

Es deber de todos, en todo ámbito, a toda hora, tomar conciencia de nuestras acciones para el buen desarrollo de los seres humanos.